Publicaciones de Categoría: seguridadTIC

Radiografía de un cerebro enganchado al móvil

Durante los últimos años, el empleo de las nuevas tecnologías se ha extendido con fuerza en la sociedad. Está prácticamente generalizado el uso de internet en toda la población, principalmente entre los más jóvenes. Según datos de la encuesta del Ministerio de Sanidad ESTUDES 2018, el 99,6 % de los estudiantes de 14 a 18 años había utilizado internet en los últimos 12 meses.

El principal problema radica en que se puede pasar fácilmente de un uso generalizado de las nuevas tecnologías a un abuso de las mismas. Se ha detectado que el uso compulsivo de las nuevas tecnologías (internet, teléfono móvil, juegos online…) es un fenómeno creciente de nuestro tiempo, sobre todo, en los grupos de gente más joven.

Las últimas encuestas ESTUDES muestran que mientras casi un 3 % de la población de 15 a 64 años hace un uso compulsivo de internet, la prevalencia de este problema es siete veces mayor entre los estudiantes de 14 a 18 años.

El uso patológico de las nuevas tecnologías ha trascendido en los últimos años la consideración de trastorno del control de impulsos para encuadrarse dentro de las adicciones de comportamiento o sin sustancia. Se acepta que tiene una base común con el resto de conductas adictivas clásicas. Esta raíz común hace que la prevalencia de consumo de drogas como el alcohol y el cannabis sea superior entre los individuos que realizan un uso compulsivo de internet.

¿Qué pasa en el cerebro?

Conocemos desde tiempo atrás los mecanismos cerebrales que median la adicción a sustancias como el alcohol, la cocaína o el tabaco. Pero la aparición de estas nuevas adicciones sin sustancia ha obligado a los investigadores a repensar los mecanismos que podrían explicar este nuevo fenómeno.

En las personas que presentan dependencia a las nuevas tecnologías se han observado cambios estructurales y/o funcionales en regiones cerebrales como la corteza prefrontal, cingular, orbitofrontal y el sistema límbico. Estas zonas alteradas están implicadas en el procesamiento de fenómenos como la recompensa, la motivación o el control de impulsos.

Alteraciones similares aparecen también en personas con otros tipos de adicciones asociadas a drogas de abuso clásicas como la cocaína o las anfetaminas. El riesgo de aparición de estos trastornos es mayor entre los adolescentes porque las regiones cerebrales implicadas no han terminado de madurar a estas edades y son más vulnerables.

Estos déficits estructurales conllevan también un peor funcionamiento de estas regiones cerebrales. Aumenta la impulsividad, disminuye el control del comportamiento y crece la dificultad para tomar las decisiones más acertadas. Todos estos fenómenos contribuyen a generar un mayor riesgo de desarrollar una dependencia de las nuevas tecnologías.

Continuar leyendo

Qué ocurre cuando Youtube se convierte en la primera fuente de información de los jóvenes


Espero que encuentres tiempo para leer esto, escrito desde mi corazón.


Continuar leyendo

Por qué el buscador DuckDuckGo es mejor que Google

Esta alternativa, que ha recibido elogios incluso del fundador de Twitter, ha empezado a interesar cada vez a más usuarios por su apuesta por la privacidad

El buscador DuckDuckGo ha saltado a la actualidad al ser proclamado como el motor de búsqueda utilizado por defecto por el fundador de Twitter, Jack Dorsey, un buscador que destaca por su apuesta por la privacidad de los usuarios al no recopilar ningún tipo de información sobre la actividad que realizan en la web, como sucede con otros navegadores como el de Google.

El buscador de Google es uno de los más utilizados por los internautas hoy en día, en él los usuarios realizan todo tipo de búsquedas, desde las más sencillas, como el nombre de un actor que no recuerdan, hasta las más complicadas, como recabar información para llevar a cabo un trabajo de investigación.

Sin embargo, la utilización de este servicio por parte de los usuarios conlleva que sus datos sean registrados en la plataforma para mejorar los servicios y productos, como señalan desde la página de seguridad de Google. Así, declaran que cuando se realizan búsquedas en Google, se obtienen indicaciones en Maps o se ve un vídeo en YouTube, la compañía almacena datos sobre la actividad del usuario.

«Las búsquedas que haces, los vídeos que ves, los anuncios que ves o en los que haces clic, tu ubicación, los sitios web que visitas, los dispositivos, navegadores y aplicaciones que usas para acceder a los servicios de Google» son los datos que recoge la compañía, según apuntan en su página de seguridad -y que el usuario puede gestionar desde Mi Cuenta de Google-.

Es por ello por lo que nació DuckDuckGo, un buscador alternativo cuya máxima es no persigue al usuario, no pone anuncios, «solo somos un buscador», como explican en su página oficial. El buscador ya lleva en la red cerca de diez años, y aunque no cuenta con la popularidad de Google, sí que tiene el apoyo de Jack Dorsey. Dorsey ha expresado a través de su cuenta oficial en la plataforma su preferencia por DuckDuckGo con respecto a otros buscadores. «Amo DuckDuckGo. Mi motor de búsqueda por defecto desde hace un tiempo. ¡La 'app' es incluso mejor!», ha declarado en su publicación. DuckDuckGo no solo cuenta con versión web, pudiendo ser añadida como extensión de los navegadores Chrome, Firefox y Safari, sino que también está disponible para los dispositivos iOS y Android a través de la App Store y Play Store, respectivamente.

Apuesta por la privacidad

DuckDuckGo se define por su apuesta por la protección de la privacidad de los usuarios cuando hacen uso de su buscador. «Somos el proveedor de herramientas de protección de privacidad líder para ayudarte perfectamente a volver a tomar el control de tu información personal online», ha asegurado el fundador y CEO de DuckDuckGo, Gabriel Weinberg.

«Buscar en la web con DuckDuckGo es completamente anónimo», ha explicado en su escrito, «simplemente no recopilamos o compartimos nada de tu información personal que pueda atarte a tus búsquedas». De esta forma, no se crean historiales ni ningún tipo de perfil de datos de cada individuo, lo que impide también que el usuario reciba anuncios personalizados.

«No guardamos tu historial de búsqueda. Por lo tanto no tenemos nada que vender a anunciantes que te persiguen por internet», describen en su página oficial. Es habitual que en otros buscadores como Google, los usuarios reciban anuncios personalizados como consecuencia del rastreo que hace la plataforma sobre, por ejemplo, las páginas que visita a través de por ejemplo las «cookies» de las webs.

Además, desde su página puntualizan que no rastrean la información, «ni navegando en modo incógnito ni navegando sin él». El modo incógnito es el que ofrecen los navegadores para que los internautas puedan hacer búsquedas sin que quede registrada su actividad.

Herramientas de búsqueda

Por otra parte, DuckDuckGo también ofrece una serie de herramientas dentro de su buscador para hacer la experiencia de búsqueda en internet «no solo privada, sino más rápida y un poco más divertida», como asegura Weinberg.

Así, cuenta con herramientas de mapas, información del tiempo, respuestas para los negocios locales como direcciones de restaurantes y números de teléfono, noticias, imágenes, vídeos, una sección para compras, definiciones, referencias a Wikipedia, conversiones entre monedas, información sobre vuelos, calculadora, cronómetro, resultados deportivos, y relación pregunta/respuesta.

"bangs" de DuckDuckGo

Además, incluye herramientas adicionales como «bangs», que son atajos que permiten llevar al usuario directamente a una de las cerca de 12.000 páginas web que ofrece DuckDuckGo cuando realiza una búsqueda. Y ofrece también la posibilidad de filtrar los resultados por localización o idioma. Incluso permite cambiar la apariencia del buscador a través de, por ejemplo, aplicar su modo oscuro.

Para saber más

Seis fórmulas para mejorar nuestros hábitos digitales en 2020

Los robos de datos, los ataques generalizados con malware y la publicidad ultrapersonalizada fueron los puntos débiles de la vida digital en el último trienio.

A medida que las tecnologías cambian, también lo hacen las recomendaciones de los expertos sobre seguridad. Acompañando el comienzo del año he elaborado una breve lista de sugerencias que nos permitirán mantener la vida digital a salvo y libre de desinformación manipulativa.

1. Establezca sus límites y no los ignore

Recientemente, como parte de mi investigación, mantuve conversaciones con varios trabajadores sexuales de Europa sobre su privacidad y seguridad digital. Una de las ideas más repetidas fue la siguiente: “La mejor manera de permanecer seguro es establecer unos límites”. Decida en base a sus preferencias, y anticipándose a las posibles consecuencias, qué datos está dispuesto a compartir en las aplicaciones y en los servicios online y cíñase a esos límites.

De esta forma, cuando la última app del mercado le pida permiso para compartir algo que usted no quiere compartir, estará más preparado para dar una respuesta.

De igual manera, también es buena idea establecer límites en las discusiones en redes en las que está dispuesto a participar. Abandone aquellas conversaciones que, más que ayudarle, le perjudiquen.

También puede resultar útil poner límite al tiempo que queremos dedicar a nuestra seguridad digital, porque de lo contrario puede convertirse en una tarea eterna.

2. Salga de la burbuja informativa

Aquellas personas que acceden a las noticias principalmente (o exclusivamente) a través de las redes sociales están sometidas a los caprichos de los algoritmos que deciden qué mostrar a cada usuario.

Debido al diseño de estos algoritmos, es probable que los lectores solo consuman artículos procedentes de fuentes informativas de su agrado y con las que tienden a estar de acuerdo. Este aislamiento respecto a otras fuentes informativas con puntos de vista diferentes y de argumentos que podrían modificar su perspectiva contribuye al establecimiento de niveles sin precedentes de partidismo y confrontación en la sociedad contemporánea.

Existen herramientas gratuitas online, como AllSides o PurpleFeed, que muestran noticias y publicaciones sociales con puntos de vista ideológicos diferentes e identifican la información aceptada por todo el espectro político.

3. Gestione sus contraseñas de manera eficaz

La mayor amenaza para la seguridad de las contraseñas ya no es su complejidad, sino el hecho de que mucha gente reutiliza las mismas claves para todas o la mayoría de sus cuentas. Los investigadores están hartos de crear notificaciones para avisarle cuando una de sus contraseñas ha sido filtrada. Es más seguro utilizar diferentes combinaciones alfanuméricas, especialmente para proteger sus cuentas más valiosas.

Para recordar todas sus contraseñas puede usar un software que las administre o bien optar por el clásico método de baja tecnología: apuntarlas en un papelito. Aunque le pueda parecer increíble, es mucho más seguro escribirlas que reutilizar la misma clave en todos lados. Obviamente, este sistema solo funcionará si usted confía en que sus allegados no van a intentar entrar en sus cuentas.

4. Active la autenticación multifactor

Añadir un paso extra para el inicio de sesión en sus redes sociales favoritas, sus cuentas de correo o sus cuentas bancarias puede implicar un plus de seguridad. Los sistemas de autenticación de múltiples factores son los que incluyen un mensaje que contiene un código de seis dígitos que el usuario debe introducir como parte del proceso de inicio de sesión.

Ninguna autenticación multifactor es mejor que otra, pero los mensajes de texto pueden ser fácilmente interceptados o espiados.

Un camino aún más seguro es la utilización de apps que generan códigos de un solo uso.


un elemento físico es un valor añadido para
la protección durante el inicio de sesión

Las personas que cambian a menudo de teléfono móvil o de tarjeta SIM, o simplemente aquellas que deseen una protección adicional, pueden considerar la posibilidad de usar una llave física que se conecta al ordenador para autorizar el inicio de sesión. Su configuración inicial puede llevar algo de tiempo pero, una vez superado el primer paso, funcionan mucho más rápido que los demás métodos.

5. Elimine las aplicaciones que no use

Las aplicaciones para smartphones conocen su ubicación de manera precisa y la comparten con empresas de publicidad y marketing.

Solo con llevar el teléfono móvil en el bolsillo, las empresas de seguimiento obtienen información sobre a dónde vamos o cuánto tiempo permanecemos en cada lugar. Además, ciertos detalles técnicos del terminal pueden dar pistas sobre la identidad de su poseedor.

Si tiene una app que no utiliza nunca, desinstálela de su teléfono. Si la volviera a necesitar siempre la podrá descargar de nuevo en un momento, pero entretanto no estará ofreciendo información personal por todas partes.

6. Actualice las aplicaciones que use

Las compañías de software no siempre conocen todas las vulnerabilidades de sus programas. Cuando lanzan actualizaciones, los usuarios no suelen saber si están solucionando un problema grave o un bug irrelevante. En cualquier caso, los expertos aconsejan actualizar el software sistemáticamente, tanto de los ordenadores como de los dispositivos móviles.

Ya que hemos pasado estos últimos años preocupados por si los hackers, los ejecutivos de las grandes tecnológicas y los programadores ávidos de información han estado tratando de robar nuestros datos y explotar nuestras debilidades digitales, intentemos estar más seguros en 2020.

Artículo adaptado del original "Seis fórmulas para mejorar nuestros hábitos digitales en 2019"

Para saber más

Star Wars y los decibelios, «El despertar de los logaritmos”

¡¡Bendito Viernes!!, te dices a ti mismo al llegar a casa después de una semana de órdago. El plan que tienes para el fin de semana promete. De momento, la tarde de hoy la vas a dedicar a echarte una buena siestecita. Has tomado esta decisión, ya que estás solo y la intensidad del sonido no supera los 10 decibelios. La verdad es que así da gusto. El sofá te espera y lo único que queda por hacer es echar al gato.

Después de este ratito de descanso llega el momento de hacer planes para esta noche. Mantienes una conversación telefónica que no supera los 30 decibelios. Sin embargo la persona con la que hablas está en medio de un grupo de gente en el que hay conversaciones cruzadas y está soportando una intensidad sonora de 50 decibelios.

Has quedado en una hora, por lo tanto hay que darse una duchita y acicalarse. La noche promete, ya que hay prevista sesión de cine y después concierto. El plan tiene muy buena pinta. Mientras te preparas, qué mejor que coger el móvil, abrir Spotify y elegir una de tus listas preferidas. 80 decibelios directos a tus tímpanos; ahí es nada. Pero bueno, hay que poner el pabellón auditivo a tono.

Sales a la calle y el tráfico por la avenida es complicado al caer la noche, como siempre a esas horas. Y ya para colmo aparece de la nada la moto a toda pastilla, con sus 100 decibelios dándolo todo. Menos mal que la situación no dura mucho, ya que empieza a ser realmente molesta.

Estás superando con creces la medida de 55 decibelios que recomienda como máximo la Organización Mundial de la Salud. ¡Anda!, pero si eso ya lo habías superado antes con Spotify a pleno funcionamiento. Bueno, lo vamos a pasar por alto, ya que sarna con gusto no pica, como diría el otro.

No es que seas muy fan de Star Wars, pero bueno, habrá que adaptarse a la mayoría. Te hubiera apetecido mas echar unas risas con los ocho apellidos catalanes, pero, la verdad es que una vez que empieza la película impresiona ver cómo llena la pantalla el Halcón Milenario soltando por sus motores 140 decibelios. Pero ojo, no vayas a creértelo, porque como bien sabrás el sonido no se transmite en el espacio exterior. ¿Por lo tanto, que intensidad tenemos? ¿0 decibelios? Luego te lo cuento, no te preocupes.

Después de echar unas cañitas con tus amistades llega la traca final: concierto en la discoteca a 120 decibelios del ala. No, lo de 120 decibelios no es el nombre del grupo. Es la intensidad sonora que está llegando a tus oídos. Aquí es donde entran en juego los logaritmos, ya que sin ellos sería imposible establecer una escala que nos ayude a medir la intensidad del sonido.

Sí señor, los logaritmos, a parte de para otras muchas cosas en nuestra vida diaria, nos sirven para poder medir y establecer los diferentes niveles de intensidad de cualquier sonido. ¿Pero, existe el silencio absoluto? La respuesta es no, o por lo menos para los logaritmos, ya que al medir la intensidad del sonido utilizando una escala logarítmica es imposible partir de cero. La razón es muy simple; el logaritmo de cero no existe.

Menuda tarde-noche de Viernes que has echado. Ha llegado la hora de meterse en el sobre. Volvemos a los 10 decibelios. Benditos logaritmos.

No puede ser… Sábado, 8 de la mañana, el eficiente operario del Ayuntamiento está taladrando para hacer un agujero en medio de la calle, justo debajo de tu ventana. Otra vez la tubería que pasa por tu calle ha decidido romperse. Te acaban de despertar 110 decibelios en lo mejor del sueño. Y ya ni te cuento lo de tu vecino, con la aspiradora a 70 decibelios, dejando el suelo del piso como los chorros del oro.

No sé cómo se las apañan las matemáticas, pero siempre acaban fastidiándote de una forma u otra, ¿o no?

Leído en:

+INFO: